Alguna noche de barrio - 1º parte.
Luciana saltaba de techo en techo esperando encontrar la libertad que se encerraba en esa habitación, era apenas un reducto, chiquito chiquito, que, aunque debiera, le parecía ajena a ella. Había esperado con ansias el verano, tambien esperaba que las dulces brisas de diciembre, junto al aroma a licuado, la despertaran cada mañana para ayudarla a salir de la cama. Mientras corría y levantaba un poco las piernas para pasar cada medianera hasta la casa del sujeto, intentaba recordar los instantes precisos, los sentimientos instantáneos, que por supuesto se le escapaban. Estaba segura de que ese era el momento, eran tiempos de aventuras, tiempos de locuras y de amor, o no, tiempos de sexo y calor. Era diciembre, y el año nuevo venía llegando.
Más allá de algún que otro resbalón, un tropezón que no es caída, Luciana lo ve. Está parado contra las ramas de un árbol. Con esa ropa suelta y asquerosa, de esa que muestra los calzones y una debiera pensar en metérseles dentro... pero no... . La miraba como expectante y destapando la cerveza. No era un licuado, pensó, era mejor, dejemos el licuado para las mañanas de estudio y de limpieza, las de castigo y las de promesas de ser una mejor hija. Y ahí estaba, tres de la mañana, había costado no dormirse, por el cansancio de no estar cansada. Mientras se acercaba lo miraba, estaba ahí, cada vez más cerca, con su sonrisa, con su pecado, la persona prohíbida, la mala persona y el mal ejemplo. Aunque trató de recordar las palabras exactas de su madre, apenas saltaron esas en su cabeza. Que más da?, si está ahí y estamos acá. A las tres de la madrugada, en esta terraza abandonada, donde ni la soledad es testigo de lo que está a punto de pasar... .
Mientras busco imagenes para un trabajo práctico de historia del arte, sobre ciertas imágenes típicas del arte paleocristiano, como la anunciación y la virgen y el niño, para ir revisando sus cambios y evolución a travez de los tiempos y movimientos, surge mi pequeña historia que despues seguire escribiendo.
pd: me inspiró algo que le pasó a mi pequeña cuñadita... estos chicos...
